|  450 AÑOS DEL DESCUBRIMIENTO DE LA BAHIA DE VALPARAISO SELLO Nº1181    Valparaíso una ciudad diferente, la ciudad que no 
              fue fundada, la ciudad que nace y surge junto al mar.Por los cerros de la costa avanza, penosamente, un pequeño 
              grupo de hombres al mando de un capitán andaluz, 
              Juan de Saavedra, son los enviados de Diego de Almagro para 
              tratar de encontrarse con las naves que les traerían 
              los ansiados abastecimientos desde el Perú. Han cruzado 
              lo desconocido, cordilleras y desiertos y caminan con la 
              vista fija en el mar, buscando un lugar, también 
              desconocido, en donde debe producirse el esperado encuentro.
 Por fin, desde las alturas que rodean a una caleta a la 
              que los changos llaman Quintil, avistan un pequeño 
              navío, el “Santiago”, que la historia 
              conocerá como “Santiaguillo”, y que, 
              al igual que los hombres de tierra, recorría las 
              radas y caletas de la costa en busca de los expedicionarios.
 Allí en Quintil, en ese momento, en ese año 
              de 1536, Juan de Saavedra bautiza ese lugar con el nombre 
              de Valparaíso dejando así, señalado, 
              un hito en el panorama geográfico e inscribiendo 
              en el libro de la historia el nombre que dará vueltas 
              por el mundo y llegará a ser uno de los símbolos 
              de todo lo que es marinero.
 Allí nacerá una ciudad, Valparaíso, 
              que bajo cinco banderas, tendrá una de las historias 
              más extraordinarias y apasionantes del Pacífico, 
              una ciudad que crecerá y se transformará en 
              la puerta de Chile, puerto en donde se forjarán las 
              grandes empresas y donde nacerán las iniciativas 
              que moverán al país.
 Han pasado cuatrocientos cincuenta años y la caleta 
              que el visionario Juan de Saavedra bautizara como Valparaíso, 
              es hoy una ciudad llena de inquietudes, generadora de vida 
              para su región, de espíritu joven y preocupación 
              renovadora, con una población orgullosa de llamarse 
              “porteña” que, recordando su glorioso 
              pasado, vive con la mirada en el futuro ya que el progreso 
              de su ciudad es el de Chile.
   FRANCISCO BARTOLUCCI JOHNSTON ALCALDE I. MUNICIPALIDAD DE VALPARAISO  |